El mercado de retail ha venido consolidando una serie de acciones sustentables que han tardado años en implementarse.
La reacción de muchas marcas se debe más a una moda y exigencia del consumidor, que a un compromiso propio por reducir su impacto ambiental.
Tan tardados han sido los movimientos, que en muchos de estos casos apenas se han convertido en compromisos que las marcas han hecho con los consumidores.