A lo largo de todo el día, en todo el ancho mundo, millones de personas mascan chiclen en cantidades enormes. Lamentablemente los restos de gomas de mascar terminan por quedar embarrados en banquetas, los tubos del metro , las ramas de los árboles y un sinnúmero de lugares. Intentando encontrar un uso útil a los chicles mascados además de mostrar claramente a los jóvenes el problema de tirar chicles.