La competitividad empresarial se puede incrementar con el diseño de productos y servicios basado en la experiencia del cliente, la transformación digital de la organización, análisis de costos, entre otros aspectos.
La firma KPMG detalló que las empresas en este 2018 tienen como prioridad la transformación de sus negocios en un ambiente de incertidumbre y disrupción.
Una de las 5 cuestiones que las empresas siguen para incrementar su competitividad es el conocimiento profundo del cliente a través de la construcción de relaciones cercanas con ellos por medio de programas de lealtad y servicio al cliente, lo cual forma también una importante iniciativa para el crecimiento.